15 de oct. de 2019
Un caso de sarampión en Boston genera advertencias de los médicos
Por primera vez desde 2013, se diagnosticó sarampión a un residente de Boston. Esta semana, la Comisión de Salud Pública de Boston informó que se diagnosticó a esta persona el 6 de octubre y, mientras podía contagiar, visitó cinco lugares, donde otras personas pueden haber estado expuestas al virus:
- Render Coffee, 563 Columbus Avenue, South End el viernes 4 de octubre, de 1:30 a 4:30 p. m.
- Cafe Madeleine, 517 Columbus Avenue, South End el viernes 4 de octubre de 2:30 a 4:45 p. m.
- Gyroscope, 305 Huntington Avenue, Fenway el viernes 4 de octubre, de 6:30 a 9:30 p. m.
- CouCou, 24 Union Park Street, South End el sábado 5 de octubre, de 11:30 a. m. a 1:35 p. m.
- Sir Speedy, 827 Boylston Street, Back Bay el sábado 5 de octubre, desde el mediodía a las 2:15 p. m.
"Cualquier persona que haya estado en contacto con esta persona y no conozca o no esté segura de su estado de vacunación contra el sarampión debe llamar a su médico", indicó la Dra. Jennifer Lo, directora médica de la Comisión de Salud Pública de Boston en una declaración, y agregó: "el sarampión es una enfermedad peligrosa pero se puede prevenir, gracias a la disponibilidad de una vacuna muy efectiva".
Es el tercer caso de sarampión reportado este año en el estado. Durante esta primavera, se registraron dos casos de la enfermedad en el área de Lowell.
Una vacuna segura y efectiva
Existe desde hace décadas una vacuna altamente efectiva y segura para prevenir el sarampión y otras dos enfermedades comunes de la infancia, las paperas y la rubéola. Conocida como vacuna MMR, se administra en dos dosis a partir del año de edad. Décadas de investigaciones han demostrado que las dos dosis son 97 % efectivas contra el sarampión, 88 % efectivas contra las paperas y 97 % efectivas contra la rubéola, también conocida como sarampión alemán.
La vacuna tiene una excelente trayectoria en la prevención de la enfermedad, según la Dra. Preeti Mehrotra, especialista en enfermedades infecciosas en Beth Israel Deaconess Medical Center de Boston.
"La vacuna contra el sarampión está fabricada a partir de una forma atenuada del virus que le permite a nuestro cuerpo identificar y combatir al virus", afirmó Mehrotra.
"El encanto de esta y de otras vacunas es que ofrecen protección contra las enfermedades sin causarlas".
Dra. Preeti Mehrotra
Según Mehrotra, las vacunas son la mejor manera de parar en seco la transmisión de la enfermedad.
La vacunación de entre el 93 % y el 95 % de la comunidad genera lo que se conoce como "inmunidad de rebaño", lo que ayuda a prevenir brotes y protege a las personas vulnerables que no pueden vacunarse.
"Hay ciertas poblaciones de pacientes a quienes no les ofrecemos la vacuna", declaró Mehrotra. "Aquellas personas con sistemas inmunológicos debilitados, como pacientes con cáncer que realizan quimioterapia, pacientes con SIDA, mujeres embarazadas y bebés muy pequeños".
Opiniones sobre las vacunas
Cinco padres comparten sus motivos para asegurarse de que sus hijos estén protegidos contra la viruela y otras enfermedades infecciosas
El virus más contagioso que se conoce
A diferencia de los virus que se contagian a través del contacto con fluidos corporales, el sarampión es muy contagioso, y se propaga a través de la tos y los estornudos, y es capaz de sobrevivir en el aire por hasta dos horas. Por lo general, el virus produce fiebre alta, tos, congestión nasal y ojos acuosos, todo esto seguido de una erupción roja de tres a cinco días más tarde. Si bien la mayoría de las personas infectadas se recupera, la enfermedad puede provocar complicaciones graves, especialmente en los niños menores de cinco años y las personas con sistemas inmunológicos comprometidos.
Según los Centros para el Control de Enfermedades:
- Aproximadamente 1 de cada 5 personas en los EE. UU que contrae sarampión será hospitalizada
- 1 de cada 1,000 personas con sarampión desarrollará inflamación en el cerebro, lo que puede provocar daño cerebral
- De 1 a 3 de cada 1,000 pacientes con sarampión morirá
Incluso entre quienes no sufren complicaciones, el sarampión puede debilitar el sistema inmunológico del cuerpo por hasta tres años después de la recuperación, y dejar a los sobrevivientes vulnerables frente a otras infecciones
Desinformación peligrosa
Este último diagnóstico en Massachusetts aparece justo cuando parecía que la ola de sarampión más grande en los EE. UU. por décadas estaba amainando. Este año, se han confirmado 1,250 casos de sarampión en 31 estados, según lo informado por los Centros para el Control de Enfermedades. Antes del brote, se consideraba que el sarampión había sido eliminado de EE. UU. en 2000, gracias a la vacuna contra el sarampión.
El brote de este año se originó en parte debido a un movimiento antivacunas, impulsado por un estudio refutado desde hace mucho tiempo que establecía una conexión entre la vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubéola y un aumento en la incidencia del autismo y los problemas intestinales.
"Hay varios estudios importantes sobre autismo y vacunas", dijo el Dr. Tom Hawkins, director médico sénior de salud de la población y analítica en Blue Cross Blue Shield of Massachusetts.
"La ciencia es clara: las vacunas no provocan autismo".
Dr. Tom Hawkins
"La vacuna puede causar efectos secundarios leves", declaró Mehrotra. "Pueden ocurrir efectos secundarios más graves, como convulsiones febriles, pero son poco frecuentes. También se pueden producir reacciones alérgicas a los componentes de la vacuna, pero los beneficios sobrepasan ampliamente los riesgos".
En los brotes recientes, los casos de sarampión fueron introducidos a Estados Unidos por personas no vacunadas, la mayoría de ellos ciudadanos estadounidenses que se contagiaron fuera del país, según Jason McDonald, vocero del Centro Nacional de Vacunación y Enfermedades Respiratorias de los CDC. "Cuando el sarampión ingresa a comunidades de personas no vacunadas en Estados Unidos, es más probable que ocurran los brotes, como está sucediendo este año. Estas comunidades dificultan el control de la propagación de la enfermedad y nos vuelven vulnerables al restablecimiento del virus en nuestro país una vez más".
Una necesidad urgente de proteger a los más vulnerables
Patsy Stinchfield ha atendido niños en tres brotes diferentes de sarampión. Como enfermera pediátrica en el Children's Hospital of Minnesota, ha visto niños morir a causa del virus y ha sido testigo del sufrimiento de muchos jóvenes y sus padres.
"El sarampión es el virus más contagioso que se conoce", dijo Stinchfield, quien también es directora sénior de prevención y control de infecciones en el Children's Hospital of Minnesota.
Stinchfield dijo que nunca olvidará a un niño de 9 meses que se contagió el sarampión mientras visitaba a su familia en Somalia, un país con poco acceso a las vacunas.
"Durante 15 días, este pequeño estuvo en la unidad de cuidados intensivos pediátricos de nuestro hospital con respirador", recordó Stinchfield. "No estábamos seguros de que pudiera sobrevivir".
Stinchfield siempre recordará a la madre del niño, junto a su cama todos los días, doblegada por el dolor y la culpa. Antes de viajar, había llevado a sus hijos a una clínica para asegurarse de que tuvieran sus vacunas al día. El pequeño se había quedado dormido y no quiso que le despertaran con la vacuna.
Stinchfield recuerda a la madre hablando de "mi funesta decisión". Y a pesar de que el niño sobrevivió, su sufrimiento y la preocupación de su madre se podrían haber evitado con una simple vacuna.
FOTO DEL Dr. TOM HAWKINS POR FAITH NINIVAGGI