La danza del amor

Su historia de amor comenzó en 2012 con algunos pasos de baile durante una reunión semanal de salsa en South End. Styled "Salsa In the Park" es parte de la serie de bienestar de Boston, patrocinada en parte por Blue Cross Blue Shield of Massachusetts, la cual continuará este invierno a través de clases virtuales de salsa y otros estilos de baile hasta el 1 de mayo.

Las clases eran una forma de hacer algo de ejercicio y divertirse. Además, en el caso de An Duong y su esposa Robyn Thompson-Duong, también fue donde sus vidas cambiaron para siempre.

"Fui por capricho", afirma Robyn, 40, sentada junto a su esposo en la sala de estar de su apartamento de Dorchester. A su alrededor, sus hijos Lien, de 5, y Logan, de 2, juegan con dinosaurios y otros juguetes.

"Me encontré allí con mi amiga y An la conocía", comenta Robyn.

"De todas formas, me hubiera acercado a hablarle", afirma An entre risas.

An, 41, había estado participando de Meta Movements, el grupo que organiza Salsa In the Park, desde hacía un tiempo.

"Es como una gran familia porque me asocié a la organización hace un tiempo y ahora bailo salsa bastante bien", afirma. "¿Hay algo mejor para hacer un lunes por la noche si quieres divertirte y no hay demasiadas opciones? Es gratis y hay música, baile, gente agradable y muchas personas especiales".

Pero esa noche específica de agosto, An se sintió atraído por una persona en particular: Robyn.

Al cabo de una semana de haberse conocido, ya eran pareja oficialmente. Dos años más tarde llegó Lien y luego Logan.

El baile continuó siendo una gran parte de la vida familiar. Cuando Lien apenas tenía un año, hicieron un viaje a Cuba con un grupo de Meta Movements. La niña tenía la edad suficiente para bailar y mover su falda y se convirtió, en palabras de su madre, en "la pequeña mascota del viaje".

Antes del inicio de la pandemia, la familia participaba regularmente de Salsa In The Park y sus pequeños los acompañaban. Quienes solían asistir los llamaban cariñosamente "salsa babies". Los lunes a la noche durante el verano era común ver a Lien moviendo las maracas al compás de la música, mientras los demás bailaban a su alrededor.

Y los amigos que conocieron con el pasar de los años solían mostrarse dispuestos a cuidar de los niños en el patio durante un par de canciones para que la pareja pudiera hacer lo que mejor hacía: bailar juntos.

"Creo que el baile es lo que nos unió", afirma Robyn. "Se convirtió en algo muy nuestro. Siempre nos pedían que bailáramos".

"Al bailar, de algún modo se rompe una barrera táctil y tienes que comunicarte a nivel físico y corporal porque estás bailando y eres la pareja de otro, y viceversa", agrega An. "En la salsa, hay roles claramente definidos: está el líder y el que lo sigue, y tienen que estar en sincronía para bailar y realizar movimientos bellos".

La pareja no fue la única en encontrar el amor y formar una familia en las clases, afirma Eli Pabon, instructora de salsa.

"Hay muchos bebés que nacieron de parejas que se conocieron en Salsa in the Park", asegura Pabon. "Sabemos de al menos cuatro".

Por estos días, esas familias bailan en casa, en su cocina o sala de estar, esperando que termine la pandemia. Pero no han olvidado el regalo que esas clases de baile gratuitas en el parque trajeron a sus vidas.

"Seguimos bailando", afirma An, "desde la noche que nos conocimos".

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^{FOTOS DE FAITH NINIVAGGI}